Primera mención del Pertussis 1913

PRIMERA MENCIÓN DEL PERTUSSIS (1913)

La tos ferina es una enfermedad conocida desde hace siglos; y el término pertussis se comenzó a emplear desde el siglo XVIII. Los episodios de tos terminan con un ruido estridente, mientras la cara se pone de un color entre rojo y púrpura; desencadenándose vómitos con cierta frecuencia. Estos episodios de tos son seguidos por fases de tranquilidad que terminan cuando se desencadena el siguiente episodio. La causa de la tos ferina (coqueluche, en lenguaje popular) era totalmente desconocida hasta comienzos del siglo XX.

Durante el siglo XIX, The New-York Daily Times (denominación que más tarde se cambiaría por The New York Times) mencionó pertussis en varias ocasiones.

Pero la primera mención sustantiva de pertussis de que se tiene noticia en prensa escrita apareció el 23 de agosto de 1913, en un artículo que comenzaba diciendo: “ha quedado establecido de modo definitivo que las tos ferina está causada por un germen denominado Bacillus pertussis, por Bordet y Gengou, sus descubridores”. Casi un año más tarde, el 10 de abril de 1914, un artículo apócrifo titulado “Médicos en guerra contra la tos ferina” (Physicians in War on Whooping Cough), en el que se hacía eco de un congreso médico durante el cual se había recomendado el aislamiento de los enfermos de tos ferina para su tratamiento. En el mismo artículo se afirmaba que el año anterior (1913) se habían diagnosticado 500 casos en niños, solo en la ciudad de New York. La cifra probablemente sea orientativa, dada la precariedad de los métodos estadísticos usados en la época.

A falta de una vacuna eficaz, y sin tratamiento farmacológico efectivo, surgían propuestas de curación, cuando menos, variopintas. Así, por ejemplo, un médico de Boston (Massachussets) propuso el 8 de marzo de 1923 el uso de rayos-X (rayos Röentgen) para el tratamiento y curación de la tos ferina. A pesar de lo que hoy puede parecernos, este tratamiento tuvo aceptación entre la clase médica.

Tras el aislamiento del bacilo (Bordetella pertussis, nombre de género latinizado derivado del apellido de su descubridor, Bordet), se comenzó a investigar en el desarrollo de una vacuna. Las primeras supuestas vacunas no recibieron excesiva atención; hasta que el 18 de octubre de 1941, un artículo, también apócrifo, refirió los resultados favorables obtenidos con una vacuna desarrollada en el Michigan Department of Health. La vacuna se desarrollaba, bien sola, o asociada a toxoide diftérico. En el mes de diciembre de 1941, The New York Times, notificaba que se habían producido 6.865 casos de pertussis, con 38 fallecimientos.

Tras una disminución en el número de casos después de la 2ª Guerra Mundial, el número de infecciones por pertussis comenzó a repuntar de manera continuada a partir de la década de 1990. Solo en Estados Unidos se notificaron 25.000 casos en el año 2005. La introducción de una nueva vacuna ese año (2005) ha hecho disminuir el número de casos notificados.

Según el CDC (acrónimo para Centers for Disease Control and Prevention), a pesar de las campañas de vacunación, solo en el año 2008 se notificaron 13.000 nuevos casos; y 19 niños, todos de menos de 1 año, murieron de resultas de la infección.

Dr. José Manuel López Tricas

Farmacéutico especialista Farmacia Hospitalaria

Zaragoza